CATANIA – El Teatro Metropolitan de Catania ha abierto el telón en el escenario de un concierto de una de las voces más bellas de la canción italiana, se trata del concierto de Fiorella Mannoia.
La acompañaron en el escenario los siguientes músicos: Diego Corradin a la batería, Claudio Storniolo al piano y teclados, Luca Visigalli al bajo, Max Rosati y Alessandro “DOC” de Crescenzo a las guitarras, y Carlo Di Francesco a la percusión y dirección musical de todo el espectáculo.
El artista ha interpretado las canciones que han marcado su carrera, desde los inicios hasta el último disco “Masters of Nothing”.
Fiorella Mannoia logró reconstruir esa atmósfera mágica que sólo su extraordinaria voz era capaz de crear dentro de un escenario teatral, compuesto por un mágico y espectacular juego de luces.
Como prometió, le dio al público un soplo de aire fresco y ligereza a corazones y mentes, sin perder de vista los temas fundamentales que acechan a la humanidad en este dificilísimo momento histórico-social. Lo hizo con inteligencia y elegancia, tal como suele colocarse al frente de los temas que le son cercanos al corazón. Escogió en su cartel, todas aquellas canciones que nos traían recuerdos de los 80, nos recordaban a algunos de sus compañeros que ya no están, nos recordaban el tema de la guerra y lo injusto que es.
Asistir al concierto de Fiorella Mannoia, para el espectador, es como sentarse en el salón de su propia casa y escuchar las canciones y charlar con ella. De hecho, el artista crea una relación directa con el espectador, habla con él, comparte sus pensamientos, sus sentimientos… y la magia radica en que el espectador siempre se reconoce en sus canciones.
Fiorella Mannoia no solo se escucha, sino que es un placer verla bailar con tanta gracia… Con sus formas sofisticadas mueve el aire, acompaña las notas de la música, interpreta los sentimientos más profundos… y es inmediatamente Poesía. Al fin y al cabo… el escenario, las palabras, la música, el espectáculo crean un escenario en el que el espectador se convierte en protagonista junto al artista, para emocionarse juntos. Fue todo esto… una velada elegante de excelente música, con un amigo especial.
